Deron Williams rozó la gloria en la NCAA

Nunca antes la Universidad de Illinois había vencido tantos partidos como aquella temporada. Los Fighting Illini pertenece al sistema de universidades de Illinois y están ubicados en los municipios de Urbana y Champaign, muy cerca de la frontera con Indiana y a algo más de dos horas y media en coche de Chicago. Era precisamente en la considerada tercera ciudad más importante de Estados Unidos donde jugaba una de sus máximas rivales, DePaul, la mítica universidad de donde salieron mitos de la NBA como George Mikan o Mark Aguirre. Pero en 2005 Bruce Weber había logrado dar ese siempre ansiado bloque de veteranos por el que suspiran todos los entrenadores de NCAA.

Entre esos veteranos que destacaban en el quinteto titular, uno brillaba por encima del resto. Y no brillaba porque liderara a su equipo en puntos, tarea que estaba bien cubierta en manos de Luther Head o Dee Brown, sino porque en el esquema que Bruce Weber, formado por tres bases y dos pívots, quien marcaba el ritmo y decía a qué se jugaba era él. Deron Williams fue parte crucial de aquella de temporada de 31 victorias y una única derrota que había hecho de Illinois el ser seleccionado como número 1 nacional de cara al Torneo Final de aquel año.

En Primera Ronda Illinois sufrió más de la cuenta para lograr vencer a la desconocida Fairleigh Dickinson. Sufrieron más de la cuenta para vencer, viéndose superados en el rebote e incluso a punto estuvieron de irse por detrás al descanso. A pesar de liderar a su equipo en asistencias, Deron Williams no estuvo acertado. Sabía que de él se esperaba que supiera leer las defensas de los Knights, pero se vio desbordado. Lanzó mal a canasta y perdió varios balones. Si su equipo quería aspirar al título, era clave que reaccionara. El siguiente rival era la Nevada de Ramon Sessions y Nick Fazekas y Deron Williams dio el primer paso adelante. De nuevo el partido dejó claro que los Illini sufrirían para llegar a Final Four, por lo que tras un primer tiempo igualado, Deron surgió para guiar a su equipo con 15 puntos y 10 asistencias, la mayoría para un James Augustine que dominaba al juego interior de Nevada. La victoria final por 71-59 colocaba al equipo de nuevo en Sweet Sixteen, su tope desde 2002.

Las Semifinales Regionales serían más sencillas que las dos rondas anteriores. El rival era Wisconsin-Milwaukee, que se había colado tras eliminar a Alabama y Boston College como cabeza de serie número 12, entrenada por el ahora técnico de Tennessee Bruce Pearl. Deron Williams se alió con su mejor amigo en aquella plantilla, Dee Brown, y ambos anotaron 21 puntos, a los que Williams añadió ocho asistencias. Al final del partido comentaba que su función en este equipo era «calmar el juego e involucrar a todos sus compañeros». Todo el quinteto titular anotó por encima de los 10 puntos y el equipo acabó por encima del 50% en tiros.

El último paso hasta la Final Four sería de nuevo en el Allstate Arena de Rosemont, a casi 3 horas de Urbana-Champaign, y ante Arizona, liderada por Channing Frye. El partido se decidió en una prórroga que Deron Williams forzó con un triple a poco menos de un minuto para el final. En la prórroga anotó otros dos triples claves y acabó por segundo encuentro consecutivo como máximo anotador de su equipo y el cuarto seguido como mejor pasador. Sus números, 22 puntos y 10 asistencias, le habían hecho situarse como la mayor esperanza de su equipo de cara a la Final Four.

Ya en Saint Louis esperaba su rival en semifinales, los Cardinals de Louisville liderados en el banquillo por Rick Pitino y en la cancha por el dominicano Francisco García. A pesar de que la victoria fue sencilla, Deron Williams no estuvo a gusto, especialmente en el tiro. Acabó con un mal 2 de 7 para 5 puntos, a lo cual unió 5 rebotes y de nuevo 9 asistencias, una vez más el mejor del equipo. Illinois se colaba en su primera Final Nacional y se enfrentaría ante la potente North Carolina. Deron debería enfrentarse a un base muy similar a él físicamente y contra el que sabría que debería correr todo el partido, Raymond Felton.

Aquellos Tar Heels contaban con un equipo de lujo. Además de Felton destacaban Sean May, Rashad McCants o Marvin Williams. Illinois llegó a estar empatados a falta de 5 minutos y con balón para forzar la prórroga que erró Luther Head. Deron obtuvo un empate técnico en el plano individual con Felton, acabando con 17 puntos y 7 asistencias y dejando esfumarse la que sería su única opción de lograr el campeonato.

Pocos días después Deron Williams se declararía elegible para el Draft de la NBA y sería elegido en el puesto 3 de aquel año. Su destino sería Utah Jazz, equipo con el que no pudo emular los éxitos conseguidos en su Universidad y llegando como máximo a Finales de Conferencia. Este año ha cambiado de equipo por primera vez en su carrera, pero vemos difícil que también pueda igualar aquellos éxitos. Mientras, esperamos que sea capaz de nuevo de guiar a su equipo, ya no sólo a rozar la gloria, sino a tocarla por completo.


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