Durante la temporada regular hay muchos partidos en los que un equipo, habitualmente muy superior a su rival, pasa literalmente por encima de su oponente. Sin embargo, y por causas evidentes, cuando llega la post temporada los encuentros se igualan, especialmente en las Finales, por lo que es mucho más complicado ver algo como lo que sucedió entre Warriors y Rockets en el tercer asalto de la serie.
Los pupilos de Steve Kerr dominaron el partido de principio a fin, arrasando en todas las categorías estadísticas que podemos ver en los habituales Box Score. Cierto es que el superlativo partido realizado por Stephen Curry eclipsa todo lo que hubo a su alrededor, pero no por ello debemos dejar escapar la oportunidad de analizar lo que fue un encuentro prácticamente perfecto de los de Oakland.
«Gran comienzo. No ha habido ninguna posesión, ni ningún pase descuidado. Cada pase es bueno, cada corte es un corte con decisión y cada bloqueo es un buen bloqueo«, les dijo Kerr a sus jugadores con menos de seis minutos disputados en el choque de ayer. Una frase que vuelve a poner de manifiesto la importancia de los detalles.
Abrumadora victoria estadística
Los 35 puntos de ventaja con los que los Warriors terminaron el partido de ayer (115-80) son solo el primer guión de una gran lista de triunfos estadísticos. Y es que Curry lidera un equipo que sabe que cada rebote, cada asistencia y cada robo les deja un paso más cerca del ansiado anillo.
Los de la Bahía fueron superiores en absolutamente todo: atraparon 60 rebotes (17 ofensivos) por los 39 (9 ofensivos) de los Rockets; asistieron a un compañero hasta en 26 ocasiones, 11 más que los tejanos; robaron 9 balones mientras que los locales se quedaron en 7; perdieron la posesión 13 veces, dos menos que Harden y compañía; y colocaron 6 tapones, esta vez dos más que sus rivales. Un dominio insultante.
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Como era de esperar, ya que lo llevan haciendo todo el año, los Warriors también tiraron mucho mejor que los Rockets, por lo que la victoria acabó siendo la segunda más abultada de la historia de los Playoffs para un equipo visitante. Los de Oakland lanzaron con un 45% de acierto en los tiros de campo y con un 39% en sus intentos desde el triple, mientras que el conjunto local se quedó en un pobre 33% en los tiros y solo pudo encestar el 20% de sus intentos desde la línea de tres puntos. En los tiros libres, la última estadística que recoge el Box Score de NBA.com, evidentemente, también fueron superiores los visitantes, que acabaron la noche con un más que digno 16-20 (80%). Howard (2-8) y sus compañeros anotaron 19 de sus 31 intentos desde la personal (61%).
El objetivo, cada vez más cerca
La temporada regular fue casi perfecta, y lo mismo se puede decir de sus primeros 13 partidos de los Playoffs 2015. Sin embargo, siempre ha habido gente que pensaba que la inexperiencia les podría pasar factura en los momentos importantes. Para todos ellos: ya es hora de descubrirse ante los Warriors.
Los de Kerr no salen nerviosos porque saben que solo tienen que hacer lo que llevan haciendo desde que el pasado mes de octubre se diera el pistoletazo de salida a la temporada 2014-15: luchar por los detalles.
Muchos dirán que el ataque lo llevan de fábrica, pero hay que moverse y ofrecerse en cada posesión, hay que cortar con la intención de recibir y anotar, y hay que poner el bloqueo como hay que ponerlo y de ninguna otra forma. Lo que ya llevan puesta es la calidad, lo demás es trabajo, ganas e intensidad.
La defensa de Bogut nunca ha ofrecido dudas (siempre que esté bien físicamente), ni las de Thompson o Iguodala, pero en los Playoffs no se gana con grandes defensas individuales. La labor del staff técnico en el apartado defensivo ha sido sencillamente espectacular. Todos ofrecen ayudas, todos pasan cada bloqueo como si fuera el último, todos meten la mano en las líneas de pase y todos ayudan a cerrar una de las facetas más importantes de este deporte: el rebote. Un trabajo colectivo que da sus frutos cada vez que pisan una cancha de baloncesto.
Por todo esto, y como ya he dicho alguna que otra vez, los Warriors merecen el anillo este año.
Los detalles ganan campeonatos.