Debido a la impresionante lista de agentes libres en la NBA durante los veranos de 2013 y 2014, repasamos el futuro a corto y medio plazo de diez de los equipos más importantes de la liga. Es el turno de Oklahoma City Thunder.
El subcampeón de la NBA posee, a priori, la plantilla con un futuro más brillante de la competición. Kevin Durant, Russell Westbrook y Serge Ibaka tienen dos cosas en común: los tres tienen 23 años o menos y los tres tienen contrato en vigor con los Thunder al menos hasta 2016.
El deseo de Sam Presti, el General Manager de la franquicia, es renovar también a James Harden, con quien se está negociando desde hace semanas. Harden ha manifestado en repetidas ocasiones que desea renovar, pero también es cierto que los Thunder superarían el límite salarial sólo con cuatro jugadores en caso de que el mejor sexto hombre de 2012 obtuviera un contrato por el máximo o cercano al máximo.
Por otro lado, Kendrick Perkins es un jugador sobre el que los Thunder tendrán que prestar especial atención. Aún le restan tres años de contrato por un montante total que supera los 25 millones de dólares, cantidad que ahoga a Oklahoma City de cara a sus presupuestos. En un mercado pequeño y de reciente creación, será exclusiva decisión del propietario de los Thunder lanzarse a la aventura de un impuesto de lujo que penaliza en exceso a partir de la temporada 2013-14 con tal de mantener a todos los jugadores que les han llevado hasta la cima del Oeste.