Steve Kerr, listo para la remontada

Un día de descanso. Así lo decidió Steve Kerr. Mental y físicamente, todo el plantel de Golden State Warriors lo necesitaba. Pero no para él. Mientras sus jugadores reponían fuerzas, su cabeza seguía siendo un ciclón.

El equipo de equipos en regular season se encuentra a una sola derrota de decir adiós a la temporada. Y su rival no da la impresión de pisar el freno.

«Bien, es un golpe de realidad en toda la cara. Estamos 3-1 abajo«, decía ayer Kerr para Associated Press. «El ‘momentum‘ puede cambiar rápidamente en Playoffs. Lo hemos visto en los últimos años. Debes hacer los deberes en casa y luego tener alguno de esos ‘momentums‘ fuera, y así tendrás la oportunidad».

Defensores del título

Los Warriors tienen dos obstáculos. El qué y el cómo. El qué es fácil: un 3-1 que levantar. El cómo habla del modo en el que ha venido la última derrota. OKC los aplastó 118-94. Los de Oakland lanzaron con un 41% de acierto y cometieron hasta 21 pérdidas de balón. Pérdidas que se transformaron en 18 puntos del rival. Curry —o el 70% de él según a quien preguntes— encestó 6 de sus 20 tentativas, mostrándose también errático en el tiro de tres y lejos de vérsele a gusto en cancha.

Ni sé ni diré ningún porcentaje. Pero el MVP unánime de la temporada —por el cúmulo de pequeñas lesiones—, ahora mismo está lejos de su cien por cien. Aunque su entrenador discrepe. «Nadie me ha dicho nada a mí sobre si Steph está al 70%. Nuestro cuerpo técnico, sus familiares, sus amigos, fuentes con conocimiento contrastado… nadie me ha dicho que esté al 70 por ciento».

Y ya hablando de la remontada, los reporteros le sacaban a la palestra ese dato que publicamos el otro día sobre el número equipos en la historia que han sido capaces de levantar un 3-1 en Playoffs. Muy muy pocos.

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Pero a este dato, Kerr le ponía un importante matiz. «Supongo la mayoría de ellos no eran defensores del título». No se equivoca demasiado el ex tirador de los Bulls. De esas nueve veces que se ha producido tan fantástica remontada, sólo en dos ocasiones los que lograron la gesta lo hacían con el emblema de «vigentes campeones» colgado de la pechera. Fueron los Washington Bullets (1978) y los Houston Rockets del doblete de Hakeem Olajuwon (1994) los que remontaron siendo defensores del título.

Otro dato interesante sería el de llevarse (o en este caso revalidar) el Larry O’Brien tras levantar un 3-1. La historia nos enseña que sólo en tres ocasiones tal remontada ha servido para que dicho equipo viera su fe recompensada con el Título de Campeón. Fueron los Celtics en dos ocasiones (1968, 1981) y los Houston Rockets en 1995.

El respeto de su adversario

Y los culpables de esta cascada de datos y estadísticas pasadas, los Oklahoma City Thunder, esperan con cautela y respeto. «Nuevamente, tenemos un gran respeto por Golden State», ha asegurado su técnico, Billy Donovan. «Sabemos lo buen equipo que son. No creo que el Game 5 sea una continuación del Game 4. Éste será un partido completamente nuevo, y vamos a tener que luchar en una atmósfera muy difícil ante un gran equipo».

«No debemos ponernos demasiada presión sobre nosotros mismos», ha dicho Kevin Durant. «Tenemos que salir ahí fuera, hacer nuestro partido y jugar con pasión y energía. Sabemos que toda la gente [público] va a estar contra nosotros y tenemos que mantenernos unidos».


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