Cuando los Wizards firmaron por un año a Alan Anderson en la pasada agencia libre, ninguna de las partes esperaba que la tempora fuese a estar marcada por las lesiones, pero la realidad es que a estas alturas sólo ha podido jugar nueve partidos.
«Me había visualizado como una pieza importante en este equipo, pero con las lesiones la situación ha sido totalmente diferente. Ni siquiera he llegado a estar al cien por cien cuando he jugado», expresa a Washington Post.
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Sometido a dos cirugías de tobillo, la primera en mayo y la segunda el 13 de octubre, el escolta de Michigan State se ha perdido los 55 primeros partidos de la temporada, ausencia tras la que volvió para caer lesionado nuevamente, esta vez con una dolencia inguinal. Pese a todo, Anderson apuesta para por acabar la temporada sobre la cancha.
«Voy a estar de nuevo sobre la pista. No sé en qué partido será aún, pero quiero recuperarme y jugar antes de que la temporada termine», sentencia.