Aunque su récord (8-14) sigue lejos de lo que se esperaba cruzando el Puente de Brooklyn, los Nets empiezan a ver la luz merced a los tres triunfos consecutivos que ha logrado enlazar la franquicia neoyorquina.
El equipo dirigido por Jason Kidd tocó fondo en el clásico de la Gran Manzana, donde hincaron la rodilla ante New York Knicks. Pero después de aquel fiasco ante el vecino, los Nets coleccionan una racha de tres victorias seguidas que le era inédita esta temporada. De hecho, Brooklyn no conocía lo que era encadenar más de una victoria de forma consecutiva. Por el momento Milwaukee Bucks, Boston Celtics y, por último, Los Angeles Clippers ya saben lo que es perder en este curso frente a Nets.
Los motivos para la esperanza en Brooklyn son aún mayores ya que tanto Deron Williams como Paul Pierce se han recuperado de sus respectivas lesiones y ya entran en el entramado táctico de Jason Kidd.