El cambio de entrenador ha sentado estupendamente en los Knicks. La franquicia neoyorkina pasó de estar fuera de la zona de Playoffs bajo la dirección de Mike D’Antoni a asegurar con varios días de antelación su pasaporte a las fases finales con Mike Woodson. Y hasta la estrella del equipo admite la importancia de su técnico.
Preguntado sobre si le gustaría tener a Woodson de vuelta al banquillo de los Knicks la próxima temporada, Carmelo Anthony fue rotundo. «Absolutamente», respondió el alero a ESPN. «Apoyo totalmente lo que Woodson ha hecho». Anthony elogió su «forma de ver el juego, y lo que saca de sus jugadores, incluído yo. Mantiene a todos los jugadores a raya, y eso es lo que necesitamos».
Con Woodson al frente, los Knicks tienen un extraordinario balance de 16-6, un rotundo 72.7% de victorias que, extrapolado a la temporada completa, hubiera colocado a New York en el segundo puesto del Este, sólo por detrás de Chicago.
Pese a este cambio de dinámica, que también ha afectado a un Carmelo Anthony que está jugando su mejor baloncesto desde que llegó a los Knicks bajo la dirección de Woodson, el alero no quiere hacer leña de su anterior entrenador. «El entrenador Mike (D’Antoni) y yo nunca tuvimos choques, discusiones o desacuerdos. Nos comunicábamos, si había algo que no le gustaba, iba él y le decía ‘entrenador, ven y hazme saber qué no te gusta, si hay algo que no te gusta o algo que no hago. Mientras tú y yo estemos en el mismo barco, nada de lo que pase fuera nos afectará'».
Pese a todo, D’Antoni fue cesado el 14 de marzo, con un balance acumulado de 18-24. El ascenso de Mike Woodson, hasta ahora asistente, ha acabado de disipar dudas, convirtiéndo a los Knicks en un rival peligroso para el rival que le toque en primera ronda, que será con seguridad los Heat de LeBron James.