Hay un antes y un después de Yao Ming en el baloncesto chino. El flamante nuevo integrante del Salón de la Fama no solo fue el jugador asiático más exitoso de la historia de la NBA (su número será retirado en breve por los Rockets), sino que relanzó el interés por este deporte en el país más poblado del mundo. Ahora, su nombre aparece como posible seleccionador.
Reformas en el baloncesto nacional
Según una información recogida por el medio chino Global Times, las autoridades deportivas del país han elaborado un informe en el que se recomienda la promoción de Yao Ming a presidente de la CBA (liga china) y seleccionador nacional. El objetivo es profesionalizar y mejorar la competición liguera, y relanzar la formación de jugadores, incluyendo la posibilidad de que jueguen en ligas competivias fuera del país.
Pero lo más llamativo, sin duda, es el papel reservado a Yao Ming. El pívot, retirado en 2011 tras no recuperarse de sus problemas físicos en el pie izquierdo, es el presidente y propietario de los Shanghai Sharks (líder actual de la CBA con Jimmer Fredette de estrella), y ha apoyado un mayor control de la competición, cuya propiedad mayoritaria es ahora mismo del gobierno chino.
Sin experiencia como técnico
Yao, de 36 años, nunca ha ejercido de entrenador desde su retirada, aunque su prestigio y ascendencia sobre los jugadores chinos ayudaría su adaptación. Yi Jianlian, actualmente el jugador más determinante del país, llegó a coincidir con Yao Ming en la selección. Pese a su liderazgo, la última experiencia de China a nivel nacional fue negativa, saliendo eliminado de los Juegos Olímpicos de Río 2016 en primera fase con un balance de 0-5. El gigante asiático espera que su baloncestista más célebre pueda enderezar la nave.