Una de las mayores trabas al posible regreso de LeBron James a los Cleveland Cavaliers era la carta que el propietario de la franquicia, Dan Gilbert, escribió tras su marcha a Miami Heat, en la cual calificaba a la salida de James como una «traición cobarde». Ahora, con su vuelta a casa, eso ha cambiado radicalmente.
«Es obvio que este momento está lleno de fuegos artificiales y de emociones. Pero se trata de volver al trabajo, sin pensar demasiado sobre lo que está pasando. Han pasado cuatro años, y en este momento es genial«, dijo en declaraciones recogidas por Associated Press sobre la relación que mantiene con James.
LeBron se mostró completamente de acuerdo con lo comentado por el propietario de la franquicia. «Estamos realmente bien. Tuvimos un mal momento y eso eclipsó todos los buenos momentos que pasamos juntos. Los dos tenemos algo en común: queremos traer un campeonato a esta ciudad. Todo se reduce a eso».