Los Clippers se plantaban en New Orleans con una buena noticia. Tras dos partidos de baja por una lesión de isquiotibiales, Chris Paul volvía a jugar con normalidad. Pero la alegría no fue completa. New Orleans, pese a la temprana expulsión de su entrenador Alvin Gentry, sacaba un valioso triunfo por 102-98 que les acerca un poco más a la zona de Playoffs.
El factor Hield
.@buddyhield with a team high 17 points!
Cuts the Clippers lead to 67-66. 4:41 left in the third on @FOXSportsNOLA #pelicansgameday https://t.co/eAA3J5B05G
— New Orleans Pelicans (@PelicansNBA) December 29, 2016
Para ello, New Orleans tuvo a dos hombres destacados. Uno habitual como es Anthony Davis (20 puntos, con 8/16 en tiros de campo), y otro que debería serlo en el futuro como Buddy Hield (17 puntos, con 7/11). El escolta bahameño, tras un flojo inicio de carrera NBA, ha encontrado su toque en las últimas semanas. En lo que llevamos diciembre, Hield promedia 10,7 puntos, con un soberbio 48,4% en triples.
Entre ambos lideraron a los Pelicans a minimizar el efecto del regreso de Chris Paul (21 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias) y la contundencia en la pintura de DeAndre Jordan. Tras un viaje accidentado, el pívot salió dispuesto a combatir en la pintura, logrando un doble-doble en el primer cuarto y terminando con 13 puntos y 25 rebotes (tercera vez en su carrera NBA que alcanzaba esta cifra reboteadora).
De menos a más
.@AntDavis23 is 82 inches tall. He needed all of 'em to snag this lob from Jrue Holiday #Pelicans pic.twitter.com/EQ4jvHAx2z
— NBA.com (@NBAcom) December 29, 2016
Con estos mimbres (y con Austin Rivers, con 22 puntos, también eficaz reemplazando a J.J. Redick como escolta titular), los Clippers dominaron durante casi todo el partido. Alvin Gentry había sido enviado al vestuario por dos técnicas tras protestar enérgicamente una falta de Jrue Holiday a Chris Paul, pero los Pelicans (dirigidos por Darren Erman) consiguieron la remontada en el último cuarto.
Tyreke Evans, resucitado para la causa tras casi un año fuera de combate, mostró signos de recuperación con dos valiosos triples, y una buena defensa hizo el resto. New Orleans, con 13-21, sigue de esta forma remontando tras su horrendo inicio de temporada con tres victorias seguidas y metido de lleno en la peculiar pelea por el octavo puesto del Oeste.