Todo empezó con 9 victorias en 14 partidos y con el mundo del baloncesto pensando que los Kings por fin iban a pelear por los Playoffs. Nada más lejos de la realidad. Los Sacramento Kings tienen un récord de 24 victorias y 45 derrotas, son terceros por la cola en la Conferencia Oeste y, un año más, las vacaciones llegan demasiado pronto.
DeMarcus Cousins ha expresado su frustración sobre la temporada de su equipo en una entrevista para el Washington Post.
«Ha sido un circo. Empezamos muy bien, pero ,desafortunadamente, me puse enfermo, y eso rompió el bloque. Asumo parte de la culpa de eso. Se que si no me hubiera puesto enfermo las cosas no habrían sucedido así. Hubiera sido imposible. Al mismo tiempo, gran parte no ha sido culpa mía. Pero ha sido un año decepcionante«, dijo el center titular de los Kings.
La franquicia ha presenciado la salida de Mike Malone, el paso por los banquillos del interino Tyrone Corbin y la llegada del mítico George Karl en apenas unos meses. Cousins ha repetido que él nunca intentó frenar la llegada del ex de Denver, y esta vez lo ha hecho con el humor de por medio.
«He llegado a la conclusión de que estoy en Sacramento. Y no es que quiera sonar arrogante, pero ¿qué hay más grande que mi nombre en Sacramento? Podría ser un maldito incendio forestal y mi nombre también saldría ¡Ha sido cerca de la casa de DeMarcus Cousins!», apuntó con gracia la estrella de los Kings.
Cousins, de 24 años, ha sido All-Star por primera vez este año y tiene contrato con el conjunto californiano hasta la temporada 2017-18.