Doc Rivers quiere que Stephenson ejerza de base

Lance Stephenson continúa con la misma dinámica con la que abandonó Charlotte: ve el aro del tamaño de un dedal.

Tras su gran campaña de eclosión en Indiana Pacers donde demostró (al menos durante aquel año) tener una muñeca fiable —49,1% en tiros de campo y 35,2% en triples— vino el desplome en los Hornets, donde su acierto en el lanzamiento se resintió, especialmente desde más allá del perímetro (17,1%).

Por ahora, bajo tutela clipper y con la intención de retomar el rumbo, su mirilla sigue igual; desajustada. En los dos partidos de pretemporada que lleva sólo ha convertido 2 de sus 14 tiros de campo, además de notársele desorientado en la ofensiva.

Lo cierto es que por nombres, Doc Rivers y su dirección deportiva han hecho un trabajo espléndido este verano, dotando al equipo con uno de los mejores banquillos de la competición. Pero lo dicho, en nombres.

La labor de quien se encumbrara con los Celtics, pasa ahora por engrasar y sacar el máximo partido un motor tan prometedor. Para ello, una de sus primeras opciones pasará por reubicar a Lance en pista; redifinir su rol.

Director, que no tirador

Durante su año plateado en los Pacers, Stephenson destacó en todos los campos, también en la dirección. Con un base como George Hill que se encasilla más en el perfil de point guard anotador que experto en el diseño de jugadas, Stephenson se apropió a menudo de esas labores de confección, y con bastante éxito. 7,2 asistencias de media nada menos.

Rivers, quiere rescatar ese jugador.»Lance no es un gran lanzador», decía el coach ayer tras la derrota ante los Raptors a Los Angeles Times, «él va a ser un jugador variopinto. Eso es lo que es. No veo a Lance como un anotador. Lo veo como un chico capaz de crear jugadas, y entiendo que eso es lo que hará para nosotros».

La segunda unidad

Lo cierto es que si éste es el planteamiento que tiene el mandamás en la cabeza, la segunda unidad de los Clippers se convierte en una auténtica incógnita. Con un quinteto titular que bien podría asemejarse bastante (sino ser idéntico) al de la temporada pasada —Paul, Reddick, ¿Johnson?, Griffin, Jordan—, el enorme talento que se acumula en la segunda unidad está por ver como lo gestiona.

Con recursos de todos los colores en puestos que no se encarguen de la dirección (Josh Smith, Jamal Crawford, Paul Pierce, Luc Richard Mbah a Moute), Stephenson tendría que «disputarse» esa supuesta delegación de armar la ofensiva con otros naturales en el puesto, háblese de Austin Rivers —apto también para el puesto de escolta— y sobre todo de un veterano como Pablo Prigioni.


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.