Dulce venganza de LeBron James ante los Knicks de Phil Jackson

Por primera vez desde la pública discusión mantenida ante los medios entre LeBron James y Phil Jackson, ambos coincidían en el mismo edificio. El presidente de los Knicks estuvo presente en la visita de los Cavaliers al Madison Square Garden y pudo ser testigo de excepción de una masacre. Los vigentes campeones arrasaron a New York por 94-126, abusando de la débil defensa de un rival que nunca pudo plantar cara.

Sin perdón

Cleveland, siempre por delante en el partido desde su primera canasta, explotó todas las carencias de los Knicks. La ausencia de Derrick Rose por molestias en la espalda y el «ascenso» a la titularidad de Brandon Jennings (16 puntos) tuvo como efecto debilitar la rotación. El quinteto inicial de los Knicks fue un juguete en manos de los Cavs que, pese a la baja del lesionado J.R. Smith (el poco utilizado DeAndre Liggins ocupó su puesto de titular), no perdonaron en ataque.

El trío formado por Kyrie Irving (28 puntos y 6 asistencias), LeBron James (25 puntos, 7 asistencias y 6 rebotes) y Kevin Love (21 puntos) nunca fue desafiado por los Knicks. Para rematarlo, Tristan Thompson se marchaba hasta los 20 rebotes (6 de ellos ofensivos) ante la escasa resistencia de un Joakim Noah dramáticamente superado. Para rematarlo, el banquillo de los Cavaliers remató desde fuera del arco, llevando al equipo a un devastador 22/40 en triples.

Ganadores y juguetones

New York, por su parte, no encontró a ningún jugador inspirado en ataque, con Carmelo Anthony (8 puntos) disminuido por problemas de faltas desde el principio, y con Kristaps Porzingis (15 puntos, con un 5/15 en tiros de campo) sin el peligro de otros partidos. Courtney Lee (16 puntos) acabaría siendo el máximo anotador de unos Knicks que mostraron su peor cara de la temporada ante su arquitecto Phil Jackson, quedándose con un balance de 12-10.

Los titulares de los Cavs, con el partido sentenciado, se permitieron incluso juguetear en el banquillo con un botellín de agua aún con el partido en juego. Un golpe de moral extra hacia su rival en una victoria extremadamente dulce para LeBron James. Con la distancia respecto a los Knicks bien marcada (también ganaron de 29 puntos en el partido inaugural de la temporada), Cleveland parece haber salido de su breve bache asentándose como líderes del Este con un balance de 15-5.


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