La etapa de Eric Gordon en New Orleans no puede ser más desafortunada. El escolta, quien aterrizó en los Hornets en la operación que llevó a Chris Paul a los Clippers, sólo ha podido disputar dos partidos con la camiseta de su nuevo equipo, y cada vez parece menos probable que pueda volver a vestirla, al menos esta temporada.
La franquicia ha anunciado, tras el partido ante los Jazz, que Gordon volverá a pasar por el quirófano para someterse a una artroscopia en su rodilla derecha como última opción para recuperarse completamente de su lesión. El escolta, que no ha podido disputar ningún partido desde el 4 de enero, alargará su periodo de baja al menos durante las seis próximas semanas.
Los Hornets llegaron a proponer una renovación a Gordon el pasado mes que el escolta rechazó. Vuelva o no a jugar esta temporada, algo que cada vez se complica más, Gordon será agente libre restringido el próximo verano.