El temido LCA: Los precedentes de la lesión de Ricky Rubio

Desgarro o rotura del ligamento cruzado anterior (LCA, o ACL en sus siglas inglesas) de la rodilla. La lesión diagnosticada a Ricky Rubio no sólo le ha dejado fuera de lo que queda de temporada NBA y de los próximos Juegos Olímpicos, sino que ha levantado sombras sobre el futuro de su carrera ante las dudas generadas por la recuperación de su rodilla dañada.

En los últimos años, varios jugadores de renombre han sufrido esta lesión. Aquí presentamos algunos de los casos más relevantes, dejando de lado a jugadores como Tony Allen, Shaun Livingston y Michael Redd que, además de lesionarse el LCA, también se dañaron gravemente otros ligamentos cruzados (medio o posterior) al mismo tiempo. En algunos casos, esta lesión, producida incluso en su época universitaria, no les impidió tener una sólida carrera en la NBA. En otros, las secuelas acabaron rebajando claramente su rendimiento, dejándoles incluso sin sitio en la liga.

Nené: El pivot brasileño no sólo se desgarró el ligamento cruzado anterior en su rodilla derecha en noviembre de 2005 (en el primer partido de la campaña para los Nuggets), sino que también sufrió un esguince en su ligamento medio colateral, y un desgarro de menisco. Pese a ello, y tras perderse el resto de la temporada 2005-06, y tras superar un tumor testicular en 2008, Nené se ha consagrado como uno de los mejores «cincos» de la NBA.

Adam Morrison: El entonces jugador de los Bobcats, tras una prometedora primera temporada (11.8 puntos como rookie) en la NBA, se desgarró el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda en un partido de pretemporada ante los Lakers el 21 de octubre de 2007. Morrison no reaparecería hasta la temporada 2008-09, y su carrera NBA langudecería a nivel individual pese a ganar dos anillos con los Lakers. Actualmente, Morrison milita en el Besiktas turco.

Derek Anderson: Una desgarro en el LCA de su rodilla izquierda durante su año senior con Kentucky no fue impedimento para que el escolta fuera elegido con el número 13 del draft por los Cavaliers. El anotador escolta, pese a sus problemas constantes de lesiones, tuvo una buena carrera en la NBA, promediando 12.0 puntos por partido, y siendo campeón con los Spurs en 2006. Anderson se retiraría en 2008 a los 34 años de edad.

Brandon Rush: Una de las lesiones más polémicas de los últimos tiempos fue protagonizada por Rush. Tras acabar su segundo año con la Universidad de Kansas, el escolta sufrió el temido desgarro en el LCA de su rodilla derecha en mayo de 2007. Rush no sólo estaría de vuelta en noviembre, sino que acabaría siendo parte del título de los Jayhawks en la siguiente campaña. En octubre de 2007, pero, se había sabido que Rush acabó lesionado en un entrenamiento ilegal organizado por los Knicks.

Corey Brewer: Ricky Rubio no fue la primera promesa de los Timberwolves en sufrir un desgarro en su ligamento cruzado anterior. El alero, hoy en Denver, se lesionaría su rodilla derecha el 1 de diciembre de 2008. Brewer no sólo se recuperaría antes del principio de la campaña 08-09, sino que justo después firmaría su mejor temporada individual, promediando 13,0 puntos por encuentro.

Nenad Krstic: El 22 de diciembre de 2006, Nenad Krstic se desgarró el LCA de su rodilla izquierda en la visita de los Lakers a New Jersey. El pivot serbio estaba firmando la mejor temporada de su carrera, promediando 16,8 puntos y 6,8 rebotes. Krstic llegaría a tiempo para la campaña 2007-08, pero sus números y su rendimiento bajaron. Tras pasar por el Triumph ruso, y consolidarse como sólido secundario en Oklahoma City y Boston, Krstic está de vuelta en Rusia como una de las estrellas del potente CSKA de Moscú.

Carl Landry: En su año junior universitario, Carl Landry se perdería los tres últimos partidos de la temporada con Purdue por un desgarro de ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha. Landry no sólo volvería a jugar a la siguiente campaña, sino que acabaría rozando la primera ronda del draft en 2007, siendo elegido en 31ª posición en 2007. El ala-pivot, hoy en los Hornets, promedia 12,1 puntos y 5,1 rebotes por partido en su carrera NBA.

Al Jefferson: El periodista de Minneapolis Jerry Zgoda recordaba, de forma premonitoria, a Al Jefferson nada más lesionarse Ricky Rubio ante los Lakers, antes de saber el diagnóstico definitivo. El pivot sufrió un desgarro del LCA de su rodilla derecha en febrero de 2009, durante la que estaba siendo la mejor temporada de su carrera (23,1 puntos y 11,0 rebotes de media). Jefferson, pese a no volver a promediar estos números en el resto de su carrera, se recuperó con normalidad y es ahora el mejor jugador de los Jazz.

Bill Walker: Otro caso de jugador universitario que superaría un desgarro de ligamento cruzado anterior (en este caso en su rodilla izquierda) y que acabaría en la NBA es Bill Walker. El hoy alero de los Knicks se lesionó durante su primer año en Kansas State. Walker se recuperó con normalidad, y formaría un peligroso dúo con Michael Beasley antes de saltar a la NBA en la segunda ronda del draft de 2008.

Robert Swift: Elegido en el 12º puesto del draft de 2004, el «siete pies», entonces en Seattle, se lesionó en el primer minuto de la pretemporada 2006-07, tras firmar en la campaña anterior los mejores números de su carrera (6,4 puntos y 5,6 rebotes). Swift volvería en la 2007-08, pero un desgarro en su menisco lateral acabaría dejándole definitivamente tocado. Tras un discreto año en Oklahoma City, Swift pasaría por la D-League para acabar jugando en la liga japonesa, donde aún milita.

Raül López: Pocos jugadores han tenido tanta mala suerte con esta lesión como Raül López. El 4 de noviembre de 2001, el talentoso base catalán sufría una rotura en el LCA de su rodilla derecha en un partido del Real Madrid ante el Forum Valladolid, regresando seis meses después. Esta contratiempo no le impediría ser elegido en primera ronda del draft 2002 y firmar ese verano con los Jazz, pero una idéntica lesión en agosto de ese año con la selección española le dejaría fuera de juego durante toda la temporada 2002-03. López jugaría dos campañas con los Jazz, pero acabaría regresando a España en 2005. Su carrera en Europa (también pasó por el Khimki ruso), pese a su sólida trayectoria, nunca tuvo el brillo que se esperaba antes de sus lesiones.


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