Llevaba tiempo sin protagonizar alguna acción reseñable. Kendrick Perkins fue expulsado del partido que su equipo perdió ante Portland por 112 a 117 tras golpear a Damian Lillard en el cuello y la barbilla, lo que hizo que el base de los Trail Blazers cayese de inmediato al suelo.
Los árbitros revisaron la jugada y Perkins fue expulsado tras ser sancionada su falta como flagrante tipo 2, lo que acarrea la expulsión inmediata.
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Lillard no se queja
“Fue sucio, eso seguro, pero es un partido físico”, explicó Lillard. “Algunos tipos hacen eso en sus equipos. A lo mejor ésa es su forma de impactar en su equipo. No lo sé, pero soy de Oakland. Me han golpeado otros veces. Me han agarrado otras veces. Fue una jugada sucia, pero para mí no fue tan mala como parece”.
Gentry le defiende
Alvin Gentry, entrenador de los Pelicans, quiso defender a su jugador ya que Perkins optó por no realizar declaraciones.
“Lo primero de todo, parece peor de lo que fue”, explicó el técnico. “Creo que lo que Perk estaba tratando de hacer era cometer falta y sujetar a Lillard. Cuando fue a agarrarle del pecho pareció que iba al cuello, pero Perk no es ese tipo de jugador. No es ese tipo de jugador. Estaba tratando de hacer una falta y pareció mucho más”.