Golden State encuentra nuevas formas de ganar ante los Clippers

Los Warriors presumieron de flexibilidad para ganar con contundencia en una noche atípica. Como en su anterior visita al Staples Center, entonces ante los Lakers, Stephen Curry se quedó sin anotar un triple (0/8) y Klay Thompson no se arrimó a la brillantez de su exhibición de dos noches antes ante Indiana. Pero, pese a ello, Golden State sacó un espléndido triunfo ante los Clippers por 98-115 que les consolida como el mejor equipo de la NBA en este inicio de temporada.

Victoria extraña

Los Warriors solo anotaron 7 de sus 30 triples intentados, una cifra extraña para los tiempos recientes de una franquicia que ha hecho del tiro exterior su principal arma. Por contra, Golden State encontró su camino a la pintura (58 puntos en la zona pintada) e hizo funcionar la presión defensiva sobre la circulación de balón de los Clippers. El mejor ejemplo fue el próximo Curry, quien lograría 7 robos de balón, su récord de carrera y el de la presente temporada en toda la NBA.

Klay Thompson, sin estar tocado de nuevo por los dioses, acabó como máximo anotador con 24 puntos. Draymond Green se permitió una poco habitual noche de responsabilidad ofensiva con 22 puntos (3/5 en triples), mientras que Kevin Durant también compensó como Curry su falta de acierto (16 puntos, con 5/17 en tiros de campo) trabajando en otras áreas, aportando 8 rebotes y 7 asistencias. El entrenador de los Warriors, Steve Kerr, empieza a tejer un brillante sistema ofensivo capaz de funcionar incluso ante un gris partido de sus dos MVP.

Una rivalidad desequilibrada

Para sumarse a una de las extrañas noches en las que Stephen Curry no hace daño desde fuera del arco, J.J. Redick vio también rota su racha de 78 partidos (récord en activo de la liga) de temporada regular con al menos un triple. Los Clippers echaron de menos un mejor partido de sus titulares (15 puntos y 5 asistencias para Chris Paul, 12 puntos y 7 pérdidas para Blake Griffin) en el que hoy por hoy es el mayor reto para cualquier equipo NBA. El buen trabajo del banquillo, liderado por Jamal Crawford (21 puntos), no sirvió de compensación.

Golden State (19-3), de esta forma, conserva su liderato del Oeste ante la presión de unos pujantes Spurs (18-4). De paso, alargan su dominio ante uno de los principales aspirantes a derrocarles en su Conferencia. Con la victoria de anoche, la racha ante los Clippers es ya de siete triunfos consecutivos, sin conocer la derrota desde el día de Navidad de 2014. El equipo de Doc Rivers, tras su espléndido comienzo de temporada, acumula ya cinco tropiezos en sus últimos 7 partidos.


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