Tras un reunión de cuatro horas en Nueva York, los jugadores han decidido «de forma unánime» rechazar las últimas propuestas presentadas por la NBA y renuncian a seguir representados por la NBPA al considerar que la vía negociadora de un nuevo convenio colectivo «esta rota». El ‘invierno nuclear’ que predijo Kobe Bryant, está aquí.
La rueda de prensa ofrecida por Billy Hunter y Derek Fisher, acompañados por decenas de jugadores -representantes sindicales de los 30 equipos y estrellas como Kobe Bryant, Chris Paul o Carmelo Anthony– ha sido clara y amenazadora. Rechazan de pleno aceptar ninguna de las propuestas ofrecidas por David Stern y, al afirmar que consideran la vía negociadora acabada, optan por dejar de ser representados por el sindicato (NBPA).
Descartado iniciar la disolución como grupo, un proceso más largo y complejo, acuerdan acudir a los juzgados y demandar a la NBA por prácticas de monopolio ya que son un colectivo sin representación impedido para realizar su trabajo (hay que recordar que el lockout es una situación impuesta por los propietarios). La demanda en los juzgados será presentada en «un par de días a lo sumo» según Billy Hunter y será llevada, junto a Jeffrey Kessler, por uno de los abogados laborales más prestigiosos de Estados Unidos, David Boies, quien protagonizó el mismo proceso en la NFL hace unos meses.
Posteriormente David Stern compareció en la ESPN y lo hizo de la forma más agria posible. Calificó de «irresponsable» al sindicato por rechazar «una propuesta justa con una temporada de 72 partidos» y dijo que los jugadores parecían estar empeñados en «autodestruirse». Stern se burló de una «decisión mágica» que ha hecho desaparecer al sindicato; también dijo que el proceso judicial no es más que una táctica negociadora para asustar a los propietarios y que «eso no estaba pasando». El Comisionado de la NBA no confirmó que fuera a cancelar más partidos pero sí avanzó que «necesitamos 30 días para empezar a celebrar partidos desde que alcancemos un acuerdo… y ahora no hay nadie con quien negociar. Nuestros aficionados son los más inteligentes del mundo y al mirar el calendario ya saben que cada vez hay menos posibilidades de jugar». Por supuesto, hubo un recuerdo para Billy Hunter: «Si yo fuera uno de los 450 jugadores de la NBPA, me preguntaría qué es lo que ha decidido Hunter. Ha puesto en serio peligro que se pueda jugar la temporada«.
Precisamente muchos jugadores de la NBA, de forma anónima, han criticado en los últimos minutos que la NBPA no siguiera los pasos del sindicato de la NFL mucho antes, algo que les hubiera podido permitir de más meses para presionar en las negociaciones con opción a haber salvado la temporada de forma completa.
Ahora, la disputa de la temporada 2011-12 está en franco peligro al iniciarse el proceso de los juzgados. La demanda de los jugadores puede ser retirada en cualquier momento si la NBA decide volver a negociar y se llega a un acuerdo, opción que por el momento David Stern y los propietarios no se plantean conforme a sus palabras. Lo único claro ahora mismo, es que los jugadores están representados por dos abogados -Kessler y Boies- que son los únicos con capacidad negociadora.