Tras conocerse que Michael Kidd-Gilchrist abandonaba lesionado el encuentro de pretemporada que enfrentaba a Charlotte Hornets y Orlando Magic, comenzaban los rumores. La periodista Mary Stevens aseguró haber visto al alero abandonar el vestuario en camilla y los aficionados de Charlotte se temían lo peor.
Un día después, es el medio Charlotte Observer el que da la noticia tras un comunicado de la franquicia: Kidd-Gilchrist se dislocó el hombro y por lo tanto estará unas semanas de baja sin poder determinar el número exacto, que podría ir desde 3 hasta 12. A 24 días del debut ante Miami Heat, todo parece apuntar a que se perderá los primeros partidos de la temporada.
Podría haber sido peor pero se trata de una baja muy sensible para el arranque de los Hornets, sobre todo en términos defensivos. Es más, durante la pasada campaña el equipo tuvo un récord de 28 victorias y 29 derrotas cuando jugó el alero y de 5-20 cuando no lo hizo. A sus 22 años es ya una pieza clave y su futuro es esperanzador, por eso no han dudado en renovar este verano su contrato por 4 años y 52 millones de dólares.