Perdiendo por 34 puntos ante Golden State Warriors y habiendo cerrado una tarjeta de 1 de 14 en tiros de campo, Kobe Bryant entiende que el problema del equipo, más allá de su desacierto, se encuentra en otros fundamentos del juego.
«Honestamente, no estoy preocupado por eso. Mi tiro mejorará. Podría haber metido 80 esta noche y no habría habido diferencia alguna. Tenemos problemas más importantes. Podría estar promediando 35 puntos puntos y cómo estaríamos, ¿3-11? Tenemos que encontrar la manera de posicionarnos mejor y poder mover mejor la pelota», expresa en declaraciones a ESPN.
Regresando a su rendimiento personal, piensa que debe encontrar mejores caminos para anotar, ya que se está centrando en lanzamientos demasiado complicados.
«Es verdad que fue duro, los tiros que hice fueron tras parada, tras bote rápido, en suspensión… son tiros difíciles de anotar con 27 años y muy difíciles a los 37. Tengo que trabajar mejor y exigir mayor ayuda con el balón para alcanzar opciones más fáciles. Esta noche fue muy frustrante», finaliza el escolta de los Lakers.
Declive progresivo
Desde que concluyese el curso 2012-13 con 25,2 puntos por partido y un 46% en tiros de campo, las lesiones han ido mermando la efectividad de Kobe hasta el 31% actual. En la 2013-14 se quedó en un 42% pudiendo jugar sólo seis partidos y en la pasada descendió hasta el 37% con 32 apariciones.