Se llevaba unos días hablando y analizando la situación de su maltrecha rodilla derecha. Y sobre todo si debía no debía jugar más en lo que restaba de temporada, con el fin de evitar algún susto mayor. Al final ayer Kyrie Irving se lesionó, pero no en las rodillas, sino en su hombro izquierdo.
Durante el tercer cuarto de la posterior derrota ante los Raptors por 100-96, Irving chocó con Jonas Valanciunas. El base se hizo mucho daño, y se quedó tendido en la pista unos instantes. Cuando se incorporó, tuvo que lanzar con una sola mano los tiros libres de esa falta, y después salió de la cancha y se dirigió hacia los vestuarios. Su encuentro acabó con 12 puntos.
«Tenía miedo de tocarlo. Estaba seguro de lo que me estaba pasando«, explicó el propio Irving, que será sometido a una reevaluación de su estado durante el día de hoy. «No podría decir que es un golpe bajo o que fuera algo parecido, pero yo he jugado con ello muchas veces y nunca había salido [de la cancha] doliéndome así».
Irving se perdió ya 11 partidos entre el 21 de noviembre y el 08 de diciembre con un dedo roto, además de los tres encuentros que tampoco pudo jugar recientemente por la lesión en su rodilla derecha.