Recuerdos, emociones, anécdotas. Muchos fueron los momentos especiales que Kobe Bryant vivió en su último All-Star Game.
Sin duda uno de ellos fue el que se produjo cuando el escolta de los Lakers decidió organizar una cena privada con nada más y nada menos que Chris Paul, Carmelo Anthony y Dwyane Wade. Una tradición que comenzaron el año pasado y que ellos mismos han denominado como Gentleman’s Supper Club.
“Respeto. Eso es lo de que se trataba. Respeto nuestro por él y por el respeto que nos ha dado. Sólo quería decirle lo mucho que ha significado para mi carrera. Me ayudó al comienzo de mi carrera porque quería estar a su nivel”, explicaba Wade sobre ese encuentro.
Regalos especiales
Ese respeto que señala Wade también se tradujo en regalos que los jugadores le hicieron a Kobe, como por ejemplo un vino italiano cosecha del 96, justo el año en el que debutó en la NBA.
“Fue una noche muy especial. Son el tipo de cosas que no puedes escuchar cuando estás compitiendo el uno contra el otro. Pero escuchas esas historias ahora y creas un sentimiento de apreciación y hermandad entre nosotros”, añadía Bryant. “No soy la persona más social del mundo, y saber que pensáis esas cosas sobre mí significa muchísimo para mí”.