La tarde-noche del domingo en la NBA destaca con dos interesantes partidos que se van a disputar a una excelente hora para los aficionados españoles.
New York Knicks – Miami Heat (19:00, NBA.TV)
El último enfrentamiento de ambos equipos este año… en temporada regular. Tal y como están las cosas en la Conferencia Este, parece que Heat y Knicks se verán las caras en la que sería una espectacular primera ronda con un gran interés deportivo y mediático.
Por tanto, podemos decir que el encuentro de esta noche es una previa de lo que probablemente se vea en mayo. Los Knicks, un equipo totalmente diferente desde que Mike Woodson se hizo cargo de equipo (13-4 con él como entrenador jefe), defenderán el Madison Square Garden como viene siendo habitual. Durante el último mes, ninguna otra franquicia ha jugado mejor como local que los Knicks, quienes han ganado los nueve partidos disputados en su cancha.
Carmelo Anthony, en medio de una espectacular racha de anotación, volverá a jugar como ala-pívot ante la ausencia de Amare Stoudamire. LeBron James se verá defenderá a Melo y ya advierte que los Knicks tienen varias caras y son peligrosos.
«Hemos visto diferentes equipos de los Knicks este año. Les vimos al principio, sin Lin, y luego con él en la alineación. Sin Amare (Stoudamire) y con Amare. Ahora (Carmelo Anthony) está jugando (como ala-pívot), lo cual implica un emparejamiento complicado para todos. Es un equipo diferente, pero es un muy buen equipo«, declaró James.
Los de Florida volverán a enfrentarse a sus habituales problemas fuera de casa, donde suman ocho derrotas en los últimos nueve partidos en los que jugaban en cancha de una franquicia con al menos el 50% de victorias.
Miami tiene prácticamente asegurada la segunda plaza del Este sin opciones realistas de cambiar de posición a mejor o peor, y Chris Bosh quiere evitar que sus compañeros no pongan toda la carne en el asador.
«Sabemos que son buenos. Sabemos de lo que son capaces», explicaba Bosh. «Eso hace muy importante el partido de hoy y más aún porque es un choque que potencialmente se puede ver en Playoffs. No queremos que aumenten su confianza contra nosotros.»
Los Angeles Lakers – Dallas Mavericks (21:30, NBA.TV)
La dura derrota sufrida en 2011 por el equipo entrenado por aquel entonces por Phil Jackson parecía casi vengada. Tres veces han jugado los dos equipos en lo que va de año y tres veces han ganado los de California, incluyendo dos choques en Dallas.
Pero de repente, la clasificación vuelve a ser caprichosa y las dos franquicias se dirigen a un nuevo enfrentamiento en primera ronda de los Playoffs. Lakers (38-22) y Mavericks (34-26) son tercero y sexto de su conferencia respectivamente, por lo que en caso de que la regular seasons terminara hoy se enfrentarian en las eliminatorias por el título.
El partido de esta noche se presenta como muy importante para los dos equipos. Los locales, siguen viendo como Clippers (37-23) y Grizzlies (35-24) no ceden en su persecución y ambos han obtenido la victoria durante la pasada madrugada.
Parece que Kobe Bryant volverá estar ausente y se perderá su quinto partido consecutivo debido a los problemas que sufre en su espinilla derecha. Mike Brown dijo ayer que «seguramente no jugará» a pesar de que «está mejorando, pero ahora mismo (su vuelta) no es algo que vayamos a acelerar.»
Sin Bryant los Lakers han ganado tres partidos de cuatro, con un importante impulso de jugadores de complemento como Metta World Peace -16,7 puntos por partido desde entonces, más del doble de su promedio duranta la temporada- y Matt Barnes, autor de 24 puntos en el choque del viernes ante los Nuggets.
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Mike Brown no estuvo presente en el partido ante Denver por motivos personales y el equipo consiguió el triunfo, un hecho que ayuda a ver las cosas de forma positiva según World Peace.n»Eso dice mucho del staff, la organización, los jugadores. Vencimos a un buen equipo (Denver)», comentó el alero.
Los Mavericks llegan al Staples Center en uno de los mejores momentos de los dos últimos meses de una irregular temporada. Tres victorias consecutivas, culminadas con el triunfo en Portland por 94-97 que unido a las derrotas de la pasada madrugada de Phoenix y Houston prácticamente les asegura un puesto en Playoffs.