Desde la última derrota de la selección masculina de Estados Unidos en un campeonato importante (el Mundial de 2006), no ha habido ningún equipo que haya puesto más en riesgo su hegemonía que España, llegando a su punto más álgido en las finales olímpicas de 2008 y 2012, y con un esperado tercer asalto en las semifinales de Río 2016 que se disputarán este viernes. Pero la rivalidad entre ambas naciones va a tener también un nuevo capítulo en la competición femenina.
Tras la victoria de España ante Serbia por 68-54 en la primera semifinal, Estados Unidos no falló ante Francia, a la que derrotó por 67-86. La indiscutible favorita del torneo (más incluso que en su equivalente masculino) se sobrepuso a la baja de su base titular Sue Bird, que será también duda para la final del sábado por un esguince de rodilla, y a una floja primera mitad donde solo pudo imponerse por 4 puntos a la selección francesa. Las pívots Sandrine Gruda e Isabelle Yacoubou y la joven alero Marine Johannes (21 años) ayudaron a mantener esperanzas para Francia de dar la gran campanada del torneo.
Taurasi decidió
Pero un gran tercer cuarto de Diana Taurasi, la máxima anotadora con 18 puntos y directora de juego titular en ausencia de Sue Bird, dejó el partido casi rematado. Sin un partido especialmente espectacular en ataque, Estados Unidos acabó imponiéndose por 19 puntos, encontrando también buenas actuaciones de Maya Moore, Sylvia Fowles (ambas compañeras en Minnesota) y Angel McCoughtry. El Team USA mantiene así una impresionante racha olímpica, sin haber perdido ningún partido (ni, por supuesto, ningún oro) desde que tuvieron que conformarse con el bronce en Barcelona 1992.
A la imponente colección de estrellas y de historia reciente que tendrá Estados Unidos en la final olímpica, España intentará contraponer su ilusión y su juego de equipo en la que será su primera final olímpica y, pase lo que pase, su primera medalla. La alero Alba Torrens (elegida en el draft de la WNBA de 2009 por Connecticut Sun) y la pívot Astou Ndour (actualmente en San Antonio Lynx) han sido las dos jugadoras más fiables de la selección española en un duelo en el que no tendrán nada que perder.