Pese al reciente episodio que ha terminado con Andrew Bynum desterrado de la actividad normal y diaria de los Cleveland Cavaliers, la franquicia de Ohio tiene otros motivos para sonreir como es el retorno de la mejor cara competitiva de Kyrie Irving. El número 1 del draft del año 2011 ha corregido en los últimos partidos el titubeante rumbo que su juego había seguido en la primera parte de la temporada.
A su nombramiento como Jugador de la Semana en la Conferencia Este el pasado 16 de diciembre, el base de los Cavaliers ha añadido una nueva serie de encuentros rindiendo a un gran nivel. Aunque la mejora de sus prestaciones no haya ido acompañada de victorias para su equipo, Irving ha vuelto a mostrar a la NBA sus dotes All-Star.
El pasado lunes 23 ante los Detroit Pistons, el jugador originario de Melbourne colocó el primer ladrillo para su semana fantástica: 21 puntos y 7 asistencias. Sin estar hablando de cifras monstruosas, aquella noche supuso el preludio de tres actuaciones más en las que la anotación de Irving superaría los 20 puntos, siendo además la única ocasión esta temporada en la que ha encadenado al menos cuatro citas seguidas rebasando el muro de las dos decenas en anotación.
40 puntos, 9 asistencias y 4 robos en el épico encuentro, con dos prórrogas incluidas, ante los Atlanta Hawks el día 26 de diciembre bien valieron la coronación de Irving en anotación esta temporada. El «2» de los Cavaliers volvió a superar el listón de los 30 puntos en la siguiente ocasión, ante los Boston Celtics: 32 puntos y 4 de 6 en triples. El último exponente de sus siete días cargados de regalos en los aros rivales llegó con 27 puntos, 3 de 3 en triples incluido, y 9 asistencias, ayer en la visita de los Golden State Warriors a Cleveland.
Además de sus sobresalientes números repartidos en cada una de las cuatro noches pasadas, Irving ha incrementado su anotación media del primer mes de competición y ya está en 22,6 puntos por partido.