Lo logrado por LeBron James en las Finales de 2016 fue único. El alero lideró a sus Cavaliers a ser el primer equipo de la historia que remonta un 3-1 en contra en Finales NBA, acabó siendo el líder en las principales categorías estadísticas (puntos, rebotes, asistencias, robos y tapones) de ambos equipos y, de paso, cerró el séptimo y definitivo partido con un triple-doble. James cumplió así su promesa hecha dos años antes, tras anunciar su regreso a Cleveland, de llevar a los Cavs al primer campeonato de la historia.
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Tras el partido, LeBron James no pudo contener las lágrimas mientras la celebración de los Cavaliers inundaba el Oracle Arena. «Me puse un objetivo hace dos años cuando volví: llevar un campeonato a esta ciudad», recordó el emocionado MVP unánime de las Finales. «Di todo lo que tenía, me dejé mi corazón, mi sangre, mi sudor, mis lágrimas en el juego. Contra todo pronóstico. No sé porqué quisimos ir por el camino más difícil, no sé porqué el hombre de arriba (Dios) me pone en el camino más difícil. Pero el hombre de arriba no te pone en una situación que no puedas controlar. Siempre mantuve la misma actitud positiva. En lugar de preguntarme ‘¿por qué yo?’, me dije que esto es lo que Él quería que hiciera. Y, Cleveland, ¡esto es para ti!».
LeBron James y el resto de la expedición de los Cavs regresarán triunfantes a Cleveland este mismo lunes, previo paso «lúdico» por Las Vegas para celebrar su título como se merece. El desfile de celebración por las calles de Cleveland, el primero que la ciudad celebrará desde 1963, cuando los Browns ganaron su único título de la NFL, está previsto para el miércoles. «Va a ser una de las mayores fiestas… Perdón, ¿una de ellas? Va a ser la mayor fiesta que Cleveland ha visto nunca», prometió LeBron James en rueda de prensa dirigiéndose a los periodistas. «Así que si os queda algo de dinero en el presupuesto, deberíais hacer un viaje a Cleveland y vivirlo».
La especial relación de amor entre LeBron James y Cleveland vivió así su etapa más especial. Natural de Akron, a menos de una hora de la ciudad, James pasó de gran promesa desde que fue drafteado en 2003 por los Cavs a principal villano después de dejar al equipo en 2010 para firmar por agente libre por Miami. Tras ganar dos títulos con los Heat y con las heridas de la ciudad cicatrizadas, LeBron James regresó a casa con el objetivo de ganar un título, el primero de la ciudad en más de medio siglo. Cleveland ya espera la «mayor fiesta» de su historia.