Los Cavs sacan lo mejor de su repertorio para contener a Boston

En lo que bien podría ser un buen aperitivo de los Playoffs del Este, los Cavaliers se enfrentaron a uno de los equipos con más ambición de asaltar el reinado de la Conferencia. Los Celtics, pese a ir por detrás del vigente campeón durante gran parte del partido, exigieron de Cleveland un esfuerzo máximo para poder amarrar su victoria por 124-118.

Las lesiones han supuesto un golpe para la ya limitada profundidad de banquillo de los Cavaliers. Pero, hoy por hoy, importa poco. Sus tres jugadores más importantes están jugando a un nivel sublime. Si bien LeBron James estuvo más impreciso de lo habitual (8 pérdidas), el trabajo de Kyrie Irving y Kevin Love lo compensó con creces, especialmente tras un primer cuarto de tanteo.

Más que LeBron

Pese a un susto final (sufrió un calambre muscular), Kyrie Irving tuvo un partido excepcional. El base terminó con 32 puntos (12/17 en tiros de campo), 12 asistencias, 5 rebotes y 3 tapones. Su sintonía con Kevin Love (30 puntos y 15 rebotes) fue exquisita. Entre ambos, más un LeBron James siempre presente (23 puntos, 11 asistencias y 8 rebotes), los Cavs fueron ampliando diferencias hasta llegar a dominar por 20 puntos en el tercer cuarto.

Los Celtics se agarraron durante todo el partido al talento de sus pareja exterior. Isaiah Thomas (31 puntos, 17 en el segundo cuarto, y 9 asistencias) tuvo momentos de explosividad imparables para los Cavs. Por su parte, Avery Bradley (23 puntos y 4 robos) mostró en Cleveland su cada vez más prometedora evolución como jugador ofensivo (su talento en defensa ya estaba fuera de toda duda).

Intento sin premio

Pero fue al final cuando se vio a un equipo capaz de desafiar más allá de la temporada regular a los Cavaliers. El último cuarto se tiñó de verde con un espléndido juego colectivo y secundarios capaz de sorprender a los grandes. Jonas Jerebko o Jae Crowder se permitieron algunos momentos de brillantez para reducir la diferencia y la tranquilidad de Cleveland al mínimo. La sangre fría de Kyrie Irving, al final, fue decisiva para evitar la gran remontada de Boston.

Tras caer tres días antes en Detroit sin el descansado LeBron James, los Cavaliers recuperan el camino ganador. Además, aprovechan los dos pinchazos consecutivos de Toronto en el Oeste (contra Warriors y Suns) para abrir más hueco en el liderato del Este, con un balance de 24-7. Los Celtics, tras perder la oportunidad de meterse en la pelea por los dos primeros puestos de la Conferencia, ven como Charlotte se iguala en la tercera plaza con 19-14.


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