106,5. Esa es la cantidad que Phoenix estaba promediando en esta temporada. Pero fue encontrarse con San Antonio, y esa cifra se vio ostensiblemente disminuida.
Triunfo de los Spurs por 98-84 ante unos Suns que se vieron forzados a cometer 28 pérdidas de balón y que acabaron hipotecándose ante un Kawhi Leonard que volvió a estar de dulce.
“Leonard ha estado de manera espectacular a ambos lados de la cancha”, resumía su entrenador, Gregg Popovich.
El alero finalizó el choque con 24 puntos y 13 rebotes, y estuvo secundado por la labor de Tony Parker, quien sumó 20 puntos y 8 asistencias. LaMarcus Aldridge se perdió su segundo partido seguido por un esguince de tobillo.
“Estamos acercándonos [al nivel que queremos]. Creo que defensivamente estamos llegando incluso más lejos que en ataque”, dijo Tim Duncan.
En los Suns, Markieff Morris anotaría 28 puntos, por los 18 de Brandon Knight.
“No sé qué es lo que estuvimos haciendo a la hora de dar la bola, pases demasiado suaves”, destacaba Jeff Hornacek. “Includo cuando tratábamos de dar la bola por arriba, los pases se quedaban demasiado cortos. Eso es difícil de superar”.