Kyle Lowry y DeMar DeRozan fueron demasiado para unos Knicks que siguen sin levantar cabeza. El conjunto canadiense se impuso con facilidad en el Madison Square Garden por 122-95.
El base de los Raptors logró su primer triple-doble de la temporada con 22 puntos, 11 asistencias y 11 rebotes. Por su parte, DeRozan, también con 22, hizo historia en la franquicia canadiense al convertirse en el jugador con mayor número de victorias.
«Es una locura como mis compañeros me apoyan y se apoyan entre sí. Solo quiero decir que hacen nuestro trabajo mucho más fácil cuando se tiene la amistad y confianza que tenemos aquí», destacó Lowry a The Associated Press.
El pívot Jonas Valanciunas también alcanzó la barrera de los 20 puntos, a los que añadió 6 rebotes y un 9/14 en tiros de campo.
DeRozan entró en los libros de historia de los Raptors al sumar su victoria número 233 que le permitió superar a ilustres de la franquicia como Chris Bosh y Morris Peterson. «Honestamente, suena muy bien», admitió el escolta. «Es un honor para mí. Estoy aquí desde el principio y conseguir tal cosa, es muy grande», añadió.
Carmelo Anthony fue el más destacado de los Knicks con 23 puntos, 11 rebotes y 5 asistencias en el quinto aniversario de su famoso traspaso. Robin Lopez continúa en línea ascendente y cosechó un nuevo doble-doble (21 puntos y 13 rebotes), y el novato Porzingis cerró el trío de anotadores con un total de 17.
Los Knicks se vieron superados en todo momento por los canadienses y, tal como reconoció Anthony tras el choque, no hubo sintonía en la pista. «Cuando no estás en la misma onda es difícil comunicarse. Y la mayor parte del partido no lo hemos hecho», explicó.
Debuta Fredette
Una parte de la afición de los Knicks enloqueció cuando Jimmer Fredette saltó a la pista. El jugador de BYU apenas disputó 01:49 minutos para anotar su único intento a canasta, un triple, su especialidad. Su técnico Rambis reconoció que lo tendrá complicado para hacerse un hueco en la rotación.
«No voy a desplazar a alguien del equipo que ha estado entrenándose duro todos los días», explicó Rambis. «Así que si él nos puede hacer un poco mejores, tendrá su oportunidad. Si no lo hace, va a ser difícil que lo consiga, pero ya veremos», agregó.