Orlando consigue su primera victoria jugando convincentemente

Anoche los Magic lograron su primera victoria tras seis derrotas previas en partidos jugados en las Finales de la NBA. El marcador fue de 108-104 y es que a pesar de que los locales jugaron un gran encuentro, los de L.A. mantuvieron opciones de triunfo hasta los últimos instantes. Eso habla muy bien de los dos equipos.

Orlando terminó la primera parte con un 75% de acierto en los lanzamientos (62.5% a lo largo de los 48 minutos, record de las Finales), un ritmo brutal imposible de aguantar durante mucho tiempo . Aun así, su ventaja en el electrónico era de sólo 5 puntos cuando se fueron a vestuarios. Kobe Bryant con 20 puntos (17 en un primer cuarto espectacular) y el resto del equipo jugando de forma muy seria habían mantenido la igualdad, propiciando a todos los espectadores un buen y emocionante partido digno de las Finales de la NBA.

La segunda parte estuvo siempre controlada -con escasas rentas, eso sí- por unos Magic que contaron con cinco jugadores en estado de gracia que pasaron de los 18 puntos cada uno: Hedo Turkoglu (18 puntos, 7 asistencias), Rashard Lewis (21 puntos,, 5 asistencias), Dwight Howard (21 puntos, 14 rebotes), Rafer Alston (20 puntos) y Mickael Pietrus (18 puntos). Por fin Van Gundy apostó por un base principal y el «callejero» Alston le respondió con creces. Pietrus fue importantísimo en la segunda mitad y Turkoglu siempre dirigió al equipo correctamente.

Por los Lakers Kobe Bryant terminó con 31 puntos y 8 asistencias pero cometiendo muchísimos fallos en los dos cuartos finales, perdiendo balones vitales en los últimos segundos, abusando del balón si pasarlo cuando sus compañeros tenían mejores opciones de tiro, fallando 5 tiros libres que de haberlos anotado estaríamos haciendo una crónica muy diferente… Mal partido del escolta, que sigue empeñado en hacer la guerra por su cuenta cuando disfruta de compañeros como Pau Gasol. El catalán se fue hasta los 23 puntos -sólo 3 rebotes- en una serie de 9 de 11 en tiros, dando la sensación de que si la bola le hubiese llegado más veces hubiera podido pasar de los 30 tantos. Ariza (13 puntos), Farmar (11) y Odom (11) estuvieron a un nivel bastante aceptable, pero el egoísmo de Kobe les impidió poder aportar acciones más decisivas al equipo de Phil Jackson.

Ahora la serie esta 2-1 y nos encaminamos a un cuarto partido vital para el devenir de la eliminatoria. Si los Magic ganan, podemos irnos a unas series largas y emocionantes gracias a un 2-2 que dejaría todo en el aire. Si Lakers consiguiese la victoria, el campeón ya tendría nombre. Los angelinos continúan siendo favoritos por el factor cancha y sobre todo por la sensación de que ayer hubieran podido ganar si dos jugadas finales las hubiesen realizado como un equipo. Orlando realizó un partido a nivel altísimo y las pasó canutas.


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