Cuando uno disputa su cuarto All-Star, y tantas cámaras se fijan en una sola cancha de baloncesto, uno sabe que lo que debe decir ha de ser dicho con pies de plomo. Paul George dijo esta tarde que su intención era liderar a los Pacers a su primer campeonato, pero cuando se mencionó el máximo que la franquicia pondrá sobre la mesa este verano, el alero dejó la puerta entreabierta.
Cuando Marc Stein, de ESPN, se reunió con el jugador —previa All-Star—, le preguntó sobre el contrato de 219$ millones en los que Larry Bird dejará su firma. «Como le he dicho a Larry, siempre quiero jugar en un equipo ganador. Siempre quiero formar parte de un equipo que pueda ganarlo todo, eso es importante», señaló el foward.
Los Pacers marchan con un récord de 29 a 28, que les vale para ocupar el sexto puesto en el Este. «Es frustrante jugar simplemente por tus números o las estadísticas, yo quiero la oportunidad de ganar un campeonato. Quise y quiero ser el primero que le traiga ese reconocimiento a Indiana, así que eso sigue en mi cabeza», apuntó George.
Así es que, por el momento y con esas declaraciones, Paul George no se compromete a extender su contrato con los Indiana Pacers. El alero tiene una player option para salir al mercado —lo hará salvo tragedia en forma de lesión— en el verano de 2018. La opción contempla 20,5 millones de dólares, por lo que George será pasto del mercado a no ser que acuerde antes su renovación con Indiana.
La dirección le quiere
Desde la franquicia dirigida por Larry Bird, se ha adoptado en todo momento la postura conservadora, con la intención de que el alero renueve en la época estival. «Sí, quiero que esté aquí durante una larga temporada, ese es plan. Antes de que empezara la temporada le dije a Paul que si quería gran contrato, que estábamos dispuestos a ofrecerle el máximo, y que si quería esperar que lo entenderíamos. Pero este año no vamos a hablar sobre ello, cuando llegue el momento Paul será quien decidirá», dijo el GM a The Indianapolis Star, el pasado mes de enero.
A Paul George aún le quedan dos años de contrato —valorados en 40,2$ millones—, pero queda claro que si en algún momento el foward decide abandonar Indiana, no le van a faltar novias.