Cada día que pasa, aquel partido de agosto en el que la lesión de Paul George estremeció al mundo del deporte va quedando más atrás. De hecho, el jugador podría estar muy cerca de volver a competir. Según publica este jueves The Associated Press, George participó esta tarde en su primer entrenamiento completo y sin restricciones de la temporada. De principio a fin y con la misma intensidad que sus compañeros.
Aunque es precipitado establecer una fecha concreta para su retorno a las pistas, el hecho de que George haya retornado a la normalidad de los Pacers parece presagiar que el jugador podrá jugar antes de que acabe el curso. El jugador, además, ha adelantado los plazos de su recuperación en tres días, ya que el 1 de marzo había sido, inicialmente, la fecha programada para su vuelta a las órdenes de Frank Vogel.
No obstante, y pese a su recuperación antes de haber acabado febrero, todavía se desconoce si el alero jugará esta temporada. «Me siento bien, muy bien. Todavía tengo esperanzas (de volver a mediados de marzo). Pero hay mucho por recorrer», alegó el propio George tras la sesión.