Los Knicks se tomaron un respiro de otra racha de derrotas y la «desaparición» por unas horas de Derrick Rose con un sólido triunfo ante Chicago. Sin su estrella Jimmy Butler y otros anotadores potenciales como Nikola Mirotic y Denzel Valentine (todos enfermos), los Bulls no fueron capaces de aguantar el ritmo de New York, que gracias al liderazgo de Carmelo Anthony (23 puntos) y el propio Derrick Rose (17) ganaron por 104-89.
Pero, a la vez, su victoria se juntó con la preocupación por los problemas físicos de otra de sus estrellas. Kristaps Porzingis está arrastrando unas molestias de tendón de Aquiles desde hace unas semanas, lo cual le dejó de nuevo en el banquillo ante Chicago. Y si bien la franquicia descarta problemas mayores, hay una preocupación sobre cuándo podrá volver a estar plenamente recuperado.
Una lesión molesta
Antes del partido, Jeff Hornacek reconoció que los problemas físicos de Kristaps Porzingis pueden dejarle fuera de juego durante más tiempo. El ala-pívot letón se encuentra dolorido de su tendón de Aquiles derecho, una situación que se está alargando más de la cuenta. «Los preparadores van a seguir trabajando en él», explicó Hornacek. «De alguna forma, si sigue apareciendo de forma intermitente no es bueno para nosotros».
Hornacek confía en que Kristaps Porzingis pueda dejar de sentir molestias para dejar de jugar, descartando de plano que estos problemas vengan de un mucho más problemático desgarro de tendón de Aquiles. Por culpa de estos problemas, Porzingis se perdió tres partidos la semana pasada y, tras jugar a medio gas cuatro duelos más, volvió a perderse el enfrentamiento de este jueves en Chicago. Pese a esta tranquilizadora victoria, los Knicks necesitan a su estrella de futuro recuperada lo antes posible para seguir vivo en la pelea por los Playoffs.