En la búsqueda urgente de la receta que permita a los Warriors darle la vuelta a la precaria situación a la que se enfrentan ante Oklahoma City Thunder, Steve Kerr piensa que una de las claves se encuentra en su pívot titular. No ya en sus funciones, que las hace muy bien, sino en que pueda ejercerlas durante más tiempo.
Y para eso, Andrew Bogut necesita ser más inteligente. Pues se está llenando de faltas demasiado pronto para lo que su entrenador estima necesario, y en los cuatro partidos disputados frente a OKC sólo promedia 14 minutos de juego. «Está cometiendo faltas. Ha hecho 13 en 56 minutos. Está haciendo faltas en cada partido casi cada 10-15 minutos. Tiene que ser más listo en ese aspecto. Le necesitamos ahí fuera», ha reconocido Kerr para The Mercury News.
El pívot australiano no es de los que se prodiga en anotación, pero su oscura labor defensiva y su capacidad reboteadora en el esquema de los Warriors es fundamental. Durante la temporada regular ha promediado siete rebotes en 20 minutos. En lo que llevábamos de Playoffs sus números eran similares, pero sus problemas con las personales ante los Thunder le están pasando factura. En los mencionados 14 minutos apenas captura 4,3 rebotes de media y sólo ha puesto en total tres tapones —por los 1,6 de media durante el resto del año—.