Derrick Rose espera que su ausencia del pasado lunes ante los Pelicans no afecte a su futuro laboral con los New York Knicks, informa ESPN NY. El base desapareció sin avisar a su equipo a escasas horas del inicio del choque que se disputaría en el Madison Square Garden.
Varios miembros de la franquicia intentaron (sin éxito) ponerse en contacto con él, e incluso se acercaron a su residencia para intentar localizarlo. Sin embargo, no fue hasta el día siguiente cuando explicó en rueda de prensa que «necesitaba» estar con su madre para tratar ciertos asuntos familiares.
«Cuando estaba en el vestuario sentía como si entendieran de donde venía», dijo Rose. «Espero que el incidente no les haya hecho cambiar de opinión, aunque quien sabe. Esto es un negocio y si no va a suceder, seguiré jugando de la misma manera que normalmente sé. No importa el lugar donde esté», explicó.
Esta semana también se filtró que Rose podría estar buscando un contrato con el máximo salarial por los Knicks, equipo que le podría llegar a ofrecer un contrato por hasta cinco años y cerca de 180 millones de dólares.
Respaldo de sus compañeros
Los Knicks, que le han apoyado públicamente, le aplicaron una importante sanción económica tras su ausencia injustificada. En su regreso a la ciudad, Rose pediría disculpas en el vestuario ante sus compañeros y sus entrenadores. «Justo cuando volví, no sentí nada más que apoyo y afecto. Me disculpé con ellos y como ya he dicho, todo es más fácil cuando te entienden», señaló.
A pesar del respaldo que tendría por parte de Phil Jackson y Jeff Hornacek, fuentes cercanas a la franquicia informaron que habrían descartado su continuidad más allá de este próximo verano. Suena con fuerza la posibilidad de Jrue Holiday para el puesto de ‘uno’, aunque también podrían estar en el mercado las opciones de Jeff Teague (Pacers) y Kyle Lowry (Raptors).