Los Milwaukee Bucks ganaron, y el Este no puede comprimirse más. Podrá debatirse sobre si la calidad que guardan sus filas es superior a la de Conferencia de enfrente o si las fuerzas se igualan por debajo, pero lo que es indudable es que donde está la emoción, es aquí. Mientras que en el Oeste hay siete plazas definidas y la gran pelea es sólo por la octava, aquí de las dentelladas no se libra (casi) nadie.
Parece que los Indiana Pacers respiran algo, un poco, bajo el manto de sus 28 victorias y su sexta plaza. Que no se acomoden demasiado; en una semana el panorama puede ser bien distinto. Entre los Bulls, que son séptimos con 25 triunfos, y los decimoterceros, los Magic, hay cinco partidos nada más. Y penúltimos en la liga aparecen esos 76ers con 18 triunfos que dicen que los playoffs de imposibles no tienen nada…
Y en esa pugna de hienas están los Bucks, que con la victoria de anoche ante los Suns se colocan con 22, por ahora, y virtualmente, fuera de la postemporada. Eso sí, con exhibiciones como la de ayer de Giannis Antetokounmpo, es más sencillo que terminados los 82 partidos de regular season finalicen entre los ocho primeros.
«Teníamos hambre de victoria», decía el griego, quien era muy consciente de que su equipo sólo había ganado 1 de sus últimos 10 partidos hasta antes de saltar anoche al parqué.
El futuro de ambos equipos
Ayer el griego se volvió a salir, con 30 puntos, 12 rebotes, 6 asistencias y 4 tapones. Con su primer All-Star —titularidad incluida— a la vuelta de la esquina, no hace sino confirmar que no nos hemos equivocado en su elección.
Acompañado como es habitual por Jabari Parker (19) y por un mucho menos habitual Teletovic (19), los de Jason Kidd se bastaron para imponerse 137-112 a otro gran partido de la sabia más fresca de los Suns. Devin Booker (31 puntos) y el mejor partido de la corta carrera profesional del nº8 del último draft, Marquese Chriss, que nos brindó una noche colosal de 27 puntos y 6 rebotes, fueron lo más destacado de un conjunto con un presente que debe ser paciente, pero de futuro ilusionante.