Tras anunciar su adiós ¿definitivo? de las pistas de baloncesto, Amar’e Stoudemire ha concedido recientemente una entrevista al diario Arizona Republic. El que fuera jugador de la NBA durante 14 temporadas ha recordado con cierta nostalgia su etapa en los Suns y ha reconocido que le hubiera gustado terminar su carrera en Arizona.
«¿Por dónde quieres que empiece? No puedo pararlo», dijo STAT sobre sus recuerdos en la ciudad de Phoenix.
Rápidamente recordó a Steve Nash, como también a dos ex-compañeros suyos como Leandro Barbosa y Goran Dragic. Allí brilló como nunca, arrasaba al pick & roll y, además de conseguir numerosos galardones individuales, alcanzó hasta en tres ocasiones las Finales de Conferencia.
Pese a todo lo vivido, Stoudemire se ha retirado como Knickerbocker. «Once a Knick, Always a Knick», decía su carta de despedida. Un gesto que no ha gustado demasiado a la afición de los Suns, pero que el jugador ha querido explicar.
«Durante los dos últimos años he realizado varias llamadas telefónicas a los Suns, pero nunca recibí una respuesta positiva», admitió. «Hubiera sido la manera perfecta de salir. Pero no quería rogarles. Mi corazón estaba entre Phoenix y Nueva York, pero solo he ido donde me han querido», agregó.
Durante este verano la gerencia que comanda Ryan McDonough se ha hecho con los rookies Dragan Bender y Marquese Chriss, y además ha logrado la vuelta de dos viejos conocidos como Jared Dudley y Leandro Barbosa.
«Trajeron a mis amigos Jared y Leandro. Eso hubiera sido una manera fantástica de terminar mi carrera. Pero no iba a seguir llamando a la puerta de alguien que no me respondía», explicó.
«Amo a los fans de Phoenix. Allí pude vivir los mejores momentos de mi carrera deportiva. Puse el esfuerzo para terminar allí, pero no fui bien recibido», señaló.