10,1 puntos por partido en el último cuarto. Suena casi a ridículo pero es tal cual. Isaiah Thomas es el mejor jugador de la liga cuando el reloj aprieta. El base de los Celtics, que con total seguridad será incluido entre los reservas para el All-Star, tiene claro que no ha llegado a este nivel para dejarlo escapar; es más, no duda en afirmar que no siente que haya nadie mejor que él.
«No se trata de ser engreído, pero me siento como el mejor jugador del mundo. Con todo el trabajo que pongo en ello, si no te sientes así es que te estás engañando a ti mismo», explica en declaraciones al programa The Ringer Show NBA.
Confiar en uno mismo es gran parte del éxito, pero sin duda se gana terreno si en el camino encuentras el apoyo y halago de los más grandes. Eso ocurre con este ‘Chicho Terremoto’, un pequeño descarado ante el que se rinde LeBron James: «Es claramente una estrella», así como Kevin Garnett: «Debería estar en la discusión por el MVP».
¿Es Thomas un elegido? Quizás sea mucho colocarle al nivel de Thomas Anderson en la aclamada ‘Matrix’, pero sin duda tiene un toque sobre la cancha que solo poseen unos cuantos de la canasta. Él lo siente así:
«Me encanta ese momento del último cuarto. No es para todos. Son situaciones más ajustadas, significan un poco más y los partidos suelen decantarse más en esos momentos. Los grandes jugadores aman esos momentos».
¿Cuál es su techo?
A principio de temporada todos confiaban en él como líder del ataque del trébol, algo a lo que correspondió en noviembre con un fantástico promedio de 26,3 puntos y 6,2 asistencias. Pero sorpresa. Un mes después, en diciembre, se iba a los 30,3 puntos. ¿Detenerse ahí? Tampoco. En enero ‘solo’ hace 33,2 por noche… Bestial.