Noche agridulce, de esas en las que te alegras por un lado, pero no puedes olvidar lo sucedido por otro.
Por primera vez en un mes y tras encadenar 13 partidos seguidos perdiendo, los 76ers lograron batir a los Nets por un marcador de 95-89.
Sin embargo, durante el tercer cuarto se vivió una situación que dejó preocupados a todos los aficionados de Philadelphia. Una acción fortuita hacía que Robert Covington recibiera una patada en plena cara por parte de Jerami Grant.
Covington cayó en el suelo desplomado y tuvo que ser trasladado inmediatamente al hospital para evaluar el golpe. Aunque el jugador se fue con el pulgar en alto, símbolo de que todo estaba OK, lo cierto es que sus compañeros se quedaron con una parte de su mente en ese hospital.
«Fue un choque significativo», destabaca Brett Brown, técnico de los locales. «Cuando ves a un jugador, a un compañero, a un amigo que abandona la cancha en camilla, lo que sientes es muy diferente a cuando se va con un esguince de tobillo».
Carl Landry anotaría 16 puntos, por los 13 tantos y 11 rebotes de Nerlens Noel. Ish Smith anduvo rozando el triple-doble, gracias a sus 10 puntos, 9 asistencias y 7 rebotes.
En el lado de Brooklyn, Brook Lopez tendría 24 puntos, mientras que Thaddeus Young acabaría con otros 21 y 9 rebotes.