Andrew Bynum ha recibido estos días muchas críticas por lesionarse la rodilla jugando a los bolos. Su fama de jugador “poco implicado” es una sombra que le persigue de manera constante y también justificada. Por si fuera poco el fuego creado, ahora se le añade más leña.
Un antiguo compañero de Bynum – del que no se ha revelado el nombre – le dijo a Tzvi Twersky, redactor de Slam Magazine, que el center de los 76ers no está muy interesado en el baloncesto. Éstas han sido las declaraciones exactas:
“No sé si el tema de los bolos es verdad, pero sí sé que nunca he conocido otro jugador en la liga al que le guste menos el baloncesto”.
Bynum, que se fue a los Sixers como parte del intercambio entre cuatro equipos que llevó a Dwight Howard a los Lakers, aún no ha jugado esta temporada. La gracieta de ponerse a jugar a los bolos en plena rehabilitación de su otra rodilla le ha hecho retrasar el tiempo estimado para su regreso, el cual no se dará, como mínimo, hasta enero.