Una de las situaciones más bizarras de la temporada NBA se vivió anoche en Cleveland. La mascota de los Cavaliers, conocida como Moondog, empezó una pelea en broma con el ala-pivot de los Pacers, rival de los Cavaliers, David West. El juego no acabó bien para Moondog (y para el actor que le da vida dentro de su disfraz), quien tuvo que acudir a un hospital por una lesión en el ojo.
En declaraciones recogidas por The Plain Dealer, el propio West explicaba la situación: «Saltó sobre mi así que pensé que estabamos jugando, y lo siguiente que sé es que cayó al suelo». El jugador de los Pacers también afirmó que «me siento fatal sobre ello, de verdad. Realmente espero que esté bien. Aseguraos de que sepa que lo siento». El actor que representa a Moondog salió del pabellón, con la cabeza de su disfraz fuera, con una toalla cubriéndose el ojo. West, de 2,06 de altura y 109 kilos de peso, soltó un puñetazo involuntario en la cara de la mascota que acabó doliendo más de lo esperado.
Finalmente, Moondog salió del hospital poco después sin sufrir ningún daño grave. Al contrario que con Kyrie Irving, la estrella de los Cavs cuya baja ha provocado que la franquicia se moviera en el mercado para fichar a nuevos bases, no se espera que se contrate a una nueva mascota en la D-League para acabar la temporada.