Si con Carmelo Anthony ya a los Knicks les cuesta ganar, sin que esté él en pista ya se convierte en una tarea que roza lo épico.
En la derrota que cosecharon ante los Trail Blazers por 101-79, el alero tuvo que perderse la segunda mitad debido a unas molestias en su rodilla izquierda.
“Esta noche sentía como fatiga, y no tenía la oportunidad de recuperarme de la noche anterior”, expresó el jugador tras el encuentro. “Me sentía ya así antes del partido, pero como sólo teníamos 7 u 8 jugadores para jugar, no tuve más remedio que salir y tratar de jugar”.
Anthony ya se perdió dos encuentros a principios de esta temporada por la misma razón: su rodilla. Y prefirió no forzar después del gran esfuerzo que hizo la noche anterior ante Sacramento, donde se fue hasta los 36 puntos.
“Carmelo es Carmelo. Es una decisión que salió de sí mismo. Tenemos que seguir para encontrar un equilibro adecuado para el equipo”, señaló su entrenador, Derek Fisher.