Ya se habló de esa posibilidad el pasado mes de diciembre y otra vez vienen a la carga.
Por aquel entonces los Brooklyn Nets ya eran un despropósito en esta liga y sus aspiraciones escasas, por no decir nulas. Joe Johnson se contagiaba de esa atmósfera reflejando las peores cifras anotadoras de su carrera. Dos meses después, la mejoría es casi imperceptible.
Al primer aviso de buyout, Johnson promediaba 11,4 tantos por noche. Ahora «progresa» hasta los 11,8. Vamos, que no progresa. Y eso hace que su inolvidable salario saque a relucir esa figura que beneficia tanto a equipo como a jugador. Johnson, con 34 años, no está para demasiadas reconstrucciones, y Mikhail Prokhorov, que al final ha aseverado su compromiso con el equipo, debe ir pensando en sabia fresca para su nuevo proyecto.
Un jugador para un aspirante
Por lo tanto, la opción que señala Marc Stein, de ESPN, realmente tendría bastante sentido. Que no esté ya en condiciones para encabezar un proyecto, no significa que el escolta no pueda ser un activo muy a tener en cuenta para completar un equipo con aspiraciones serias de anillo.
Su físico, su muñeca, su sentido del clutch, su experiencia y su eterna clase aún pueden servirle de mucho a aquellos conjuntos que buscan la última pieza de su puzzle. Habrá que estar atentos al futuro inmediato de «JoJo».