Ayer les llegó el turno a los New York Knicks. Carmelo Anthony había estado anteriormente reunido durante dos horas con Los Angeles Lakers y, a última instancia de la tarde, Phil Jackson y los dirigentes del conjunto neoyorquino se sentaron a negociar con el jugador.
Pese a que la iniciativa de Phil Jackson en un primer momento era ofrecerle un contrato ajustado a Carmelo, finalmente los neoyorquinos le han plantado encima de la mesa el máximo salarial, es decir, un acuerdo por 5 años y un total de 129 millones de dólares. A los Knicks no les quedaba otra opción. Sus rivales tienen mejor plantilla y agotaron la última bala que les quedaba en la recámara.
Descartada prácticamente la opción de Dallas Mavericks, las ofertas de Chicago Bulls y Houston Rockets parecen las más interesantes para Carmelo, sin embargo, éstas solo pueden firmarle por 4 años y 96 millones.
El jugador todavía no ha tomado ninguna decisión. Según fuentes cercanas a la situación, valorará todas sus opciones a lo largo del fin de semana y es posible que para principios de la próxima conoceremos su nuevo destino.