Ray Allen rechazó a los Rockets en 2014

El último partido que Ray Allen disputó en la NBA se remonta a las Finales 2014, ante los San Antonio Spurs. Habiendo sido el principal motivo por el que los Miami Heat tumbaron a Tim Duncan y compañía hacía solo un año, en 2013, la victoria tejana fue incontestable (4-1). Y ése fue el anochecer del mejor triplista de siempre en la liga norteamericana.

Después de aquellas Finales 2014, Allen mantuvo un inquietante estado de stand by en el que no estaba oficialmente retirado pero tampoco se decidía por ninguna de las muchas ofertas que llegaban a su buzón personal.

Solo hace unas semanas, Allen anunciaba su el colgamiento definitivo del hábito baloncestístico, con una carta personal que es uno de los textos más inspiradores jamás paridos de un deportista profesional.

Pues bien, antes de las actualizaciones más recientes de su situación, Allen estuvo cerca de jugar con los Houston Rockets. Fue durante el verano del año 2014. Habiendo caído en las Finales antes los Spurs, Allen recibió una propuesta bastante decente por parte de Daryl Morey y los Rockets de James Harden y Dwight Howard, tal como se hizo eco el periodista Jeff Zillgitt, de USA Today.

La familia

Al parecer, la persuasión de Houston estuvo cerca de concretarse en forma de contrato, sin embargo en última instancia Allen decidió no aceptar la propuesta de unos Rockets que acabaron siendo finalistas de la Conferencia Oeste. Solo los Warriors consiguieron llegar más lejos en aquella temporada 2014-15.

Algunas fuentes próximas a la información apuntaron que Allen hizo la cobra a Houston debido a que quería invertir más tiempo con su familia y también a que la propuesta no era todo lo sugerente que él deseaba.

Es muy posible que las necesidades salariales del veterano escolta no fueran satisfechas debido a que los Rockets estaban ya por encima del tope salarial aquella temporada. Por ello, todo lo que ofrecían era una excepción de nivel medio, por la cual Allen cobraría una cantidad cercana a la media del resto de la liga.

Finalmente, ni Houston ni nadie consiguió despegar al metódico Ray de su familia. Durante toda su vida deportiva, y antes, a su juicio no les había dedicado todo el tiempo que debía. Así que, tras su retiro, los partidos de Allen se juegan en casa.

El final del viaje

«Ahora, la pregunta más importante en tu vida no es “quién se supone que soy” o incluso “qué tengo que hacer para ganar otro campeonato. Lo importante es, “papá, ¿sabes lo que pasó en la clase de matemáticas hoy? Esa es la recompensa que te llega al final de tu viaje», escribía Allen en su tremendamente inspiradora carta de retiro.


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