Knicks: Bienvenido Mr. Crawford

Resulta que desde que se acabó el lockout oficialmente y empezó el baile de incorporaciones e intercambios de jugadores, los Knicks no han parado de hacer movimientos contrarios a los que muchos creían que estarían haciendo.

Cuando en el verano de 2010 Chris Paul brindó por un traspaso a New York, todos creímos que los Knicks harían lo imposible para hacer que eso ocurriera. Pero meses más tarde, la franquicia se desprendió de casi todo lo intercambiable para hacer llegar a Carmelo Anthony a la Gran Manzana, así que no queda ya munición suficiente para afrontar un acuerdo de traspaso de tal magnitud. Si los Knicks quieren a CP3, deberán rezar para que Paul no firme por otra franquicia antes del día de Navidad primero, y tratar de seducirle con un salario menor al que cobraría en cualquier otro equipo cuando sea agente libre el próximo verano después.   

Para ser competitivos ahora, y considerando que en la lista de guards solo figuran en nómina Toney Douglas, Landry Fields y el rookie Iman Shumpert, se hace necesario salir al mercado y traerse algo mejor para esa posición. Todo ello entendiendo que Mike Bibby, recién firmado por una temporada a coste mínimo de veterano, no es precisamente de lo que aquí se está hablando.

Según hizo público primero Marc Berman, del NY Post, los Knicks están cerca de cerrar un acuerdo para traer de vuelta al Madison Square Garden al exknickerbocker Jamal Crawford. Su llegada podría incluir la marcha del mismo Douglas, más Renaldo Balkman y Billy Walker. Con lo que un quinteto titular con el que empezar esta temporada de 66 partidos podría ser: Crawford, Fields, Anthony, Stoudemire y el también recién llegado Chandler. (Pausa para inspirar aire).

Los Knicks ya han pasado por aquí antes con Crawford y saben que se trata de un probado anotador.  Y aunque no sean precisamente canastas lo que más requiera esta plantilla, Mike D’Antoni se sentiría mucho más cómodo con unas buenas dosis de veteranía en el point guard, antes que dejar el juego del equipo en las inexpertas manos de Douglas o Shumpert.

La salida de Chauncey Billups ha dejado heridas en muchos de los corazones de los aficionados de los Knicks, pero sin ella, la llegada de Tyson Chandler no hubiera sido posible, así como tampoco la posesión de uno de los mejores frontcourts que existen en el baloncesto actual. De poder añadir a la mezcla la presencia de Crawford, New York contaría con un sólido elenco de veteranos de enorme calidad para poder pujar legítimamente a estar arriba del todo de la Conferencia Este.

Si con Chandler se añadió rebote, defensa e intimidación en ambas canastas; con Crawford los Knicks serían capaces de anotar más que cualquier otro equipo de la Liga. Juntos, y con las piezas que New York ya tiene, estaríamos ante un claro aspirante a llegar a las próximas Finales de la NBA.


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