Miami Heat: Bosh por un center, a considerar

Chris Bosh ha decepcionado a muchos analistas y fans de los Miami Heat en su primera temporada con el equipo, y decir cualquier otra cosa al respecto sería faltar a la verdad. Ésta, a veces, duele.

Después de que la temporada del equipo de Florida terminara en una triste y dura derrota en las Finales de la NBA ante Dallas Mavericks, pudimos ver a un Bosh visiblemente contrariado, llegando incluso a arrodillarse mientras lloraba en su camino hacia el vestuario tras el partido definitivo.

Preguntado recientemente por la ESPN Radio al respecto de tan trágico final, Bosh postea y finta al reportero, como si tratara de esconder que su “The Decision” particular hubiera sido un error, amparándose en que lo que necesitan ahora los Heat es juntarse más que nunca como equipo para superar tal frustración. Una declaración lo suficientemente valiente viniendo del tercer mejor jugador del roster, que forma parte intrínsicamente del hecho de decidir juntar talento individual aún a costa del rendimiento como conjunto.

Y es que antes de la firma del power forward con Miami en el convulso verano de 2010, Bosh era uno de los más apetecibles agentes libres que estaban en el mercado. Después de dos temporadas consecutivas promediando unos sólidos doble-dobles para Toronto Raptors, Bosh parecía una fuerza imparable dentro de los mejores cuatros de la Liga. Algo que no hemos visto, al menos con regularidad, en su primer año en Miami.

Llegue cuando llegue, se puede dar por seguro que el nuevo Convenio Colectivo de la NBA incluirá duras restricciones económicas a las franquicias de la Liga, así que a los Heat nos les quedará más remedio que tirar de creatividad a la hora de tratar de estructurar los salarios de sus jugadores a la nueva realidad si desean seguir haciendo pasos hacia delante.

Y seamos claros en este punto: Si por ello los Heat deben traspasar a una de sus estrellas, no hay dudas de que ésta sería Bosh. Dwayne Wade es el líder incuestionable de la franquicia, y la sola idea de traspasar a LeBron James hace que, como mínimo, nos lo tomemos a chiste malo.

Miami Heat fracasó estrepitosamente a la hora de encontrar un center de impacto a lo largo de la pasada campaña. Con Udonis Haslem (ya recuperado) absolutamente capaz de llenar el posible hueco de forma digna en la posición de power forward, traspasar a Bosh por un cinco sólido y, de paso, liberar aún más si cabe el ataque para Wade y James, podría ser una idea de buen desarrollo.

Y es que, además, Bosh ha sido una constante víctima de merecidas críticas voraces durante el año pasado; a las que, en vez de responder dando ejemplo dentro de la pista, lo hizo a menudo en público y siempre a través de la prensa, justo cuando los Heat necesitaban más que nunca que sus jugadores, y especialmente sus estrellas, cerraran la boca y de dedicaran a jugar.

Recordar aquí que Pat Riley es un maestro a la hora de lanzar elocuentes mensajes a sus plantillas, y traspasar a Bosh sería quizá uno de los más potentes que se le recordarían.


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