Los Philadelphia 76ers sufrieron anoche una de esas derrotas que ningún aspirante a formar parte de la élite de la NBA debería poder permitirse. Los Atlanta Hawks, aprovechando la ausencia de Joel Embiid, asaltaron el Wells Fargo Center por 121-123 liderados por una sensacional actuación de Kevin Huerter y John Collins, y forzaron un pequeño paso atrás de los de Brett Brown en la lucha por uno de los tres primeros puestos del Este. Ben Simmons, dolido por el resultado, fue bastante crítico con su equipo en las declaraciones posteriores.
«Creo que hemos sido demasiado blandos» afirmó para ESPN. «No hemos cumplido a nivel físico. Defensivamente, no nos tomamos como algo personal que alguien nos anote una canasta, cuando es algo que debería dolernos en el orgullo. Cada vez que alguien anote sobre tu defensa deberías sentirte frustrado».
Simmons, que firmó su séptimo triple-doble de la temporada, no se quedó ahí a la hora de hablar de la falta de compromiso defensivo: «Tenemos que tomarnos esto como un reto. A nadie le gusta que los atacantes le busquen en los emparejamientos todo el tiempo, así que tenemos que salir a frenar y encerrar al rival aunque solo sea por orgullo propio. Esto va por todos, incluido yo» concluyó.
Butler trata de calmar ánimos
Jimmy Butler, máximo anotador del choque con 30 puntos, fue preguntado posteriormente por las declaraciones del base australiano. El ex de los Wolves, que ha vivido ya demasiados conflictos en lo que va de temporada, no quiso echar más leña al fuego y optó por tratar de rebajar el tono.
«La palabra ‘blando’ no me gusta» aseguró. «Creo que simplemente no hemos hecho lo que deberíamos, pero no voy a salir a llamar blando a nadie. Nos han superado en cada aspecto del juego y han hecho lo que han querido durante 48 minutos, pero espero que sigamos unidos después de esto y que nadie empiece a señalar a nadie» dijo para acabar.
(Fotografía de portada: Mitchell Leff/Getty Images)