Informábamos hace unos días que los Pacers habían decidido que Danny Granger no disputase los últimos dos encuentros de pretemporada que les restaban debido a unas molestias en su pantorrilla izquierda. En las reevaluaciones realizadas desde entonces se ha constatado la lesión y parece bastante improbable que pueda estar para el inicio de la temporada, tal y como explicaba ayer su entrenador Frank Vogel.
«Hay una posibilidad de que pudiera jugar [contra los Magic], pero es improbable«, señalaba el técnico, justo después del entreno del jueves.
La dirección técnica de la franquicia no va a arriesgar con el estado de Granger, por lo que sólo volverá cuando esté totalmente sano. Y más teniendo en cuenta que durante el año pasado estuvieron mucho tiempo sin él y el equipo rindió también de una manera sobresaliente.