Derrick Rose aceptó este pasado verano una oferta por el mínimo salarial para unirse a LeBron James y sus Cleveland Cavaliers. El que fuera MVP en 2011 sorprendió por su decisión, dado que su postura era la de conseguir un contrato abultado. Al contrario de lo que pudiera ocurrir, el base formado en la Universidad de Memphis se ha unido a los recientes subcampeones para demostrar que todavía le queda mucho baloncesto.
«Tengo la oportunidad de reintroducirme nuevamente en la liga. He apostado por mí. Esa fue una de las razones por las que vine aquí. Soy de Chicago. Tengo ese lado de empuje en mí. Así que la próxima vez vas a tener que pagarme. Y vas a tener que pagarme el doble. Así que está bien por ahora», destacó Rose a ESPN.
El jugador de 29 años se embolsará un total de 2,11 millones de dólares, siendo uno de los peor pagados de la plantilla, solo por delante de Ante Zizic o los contratos ‘no garantizados’ de Walter Tavares y Kay Felder. Lejos están sus compañeros LeBron o Kevin Love con 33,28 y 22,64 millones respectivamente.